El bajista y fundador de la Doncella de Hierro fue entrevistado por la gente amiga de Bass Player. Ahí reflexionó sobre la longevidad de la banda, que pronto comenzará la gira con la que celebrará su 50º aniversario, "Run For Your Lives”.
"Iron Maiden duró más de la mitad de mi vida, y cuando lo veo así, es increíble. No lo puedo creer”.
"Lo más satisfactorio es que logramos el éxito con nuestras propias condiciones. Nos mantuvimos al margen del negocio de la música la mayor parte del tiempo. Fuimos testarudos y no nos dejamos intimidar por la gente de las discográficas”.
"Ya en el tercer disco prohibimos la entrada al estudio a la gente de las discográficas. Estaban enloquecidos porque el single era muy diferente al anterior, que había sido un éxito. Les dijimos que se fueran”.
“Sólo tenés que ser fuerte en tus convicciones y no hacer lo que no querés hacer. También tuvimos la suerte de contar con un manager muy bueno (Ron Smallwood). Le decimos lo que queremos hacer y él va y lo hace. Es un escudo antibalas contra el fuego enemigo que pueda lanzarnos la gente de las discográficas".