Algunos suelen llamarlo intervenciones urbanas, otros grafiti, pero el consenso general ya lo califica como obras de arte. Y es que el misterioso artista mundialmente conocido como Banksy volvió a dejar su sello en la ciudad de Londres, más específicamente en el vecindario de Finsbury Park.
El lunes por la mañana los vecinos que pasaron por la calle Hornsey Road se sorprendieron al encontrarse con una obra que, horas más tarde, el artista confirmó de su autoría en su cuenta de Instagram.
Se trata de un mural en el costado de un edificio de cuatro pisos pero ubicado justo detrás de un árbol totalmente pelado. Entonces se puede ver la figura de una persona sosteniendo un artefacto similar a un rociador de pintura y la pared chorreando de color verde, con la intención de sustituir el follaje ausente del cerezo.
Así, hay quienes piensan que la obra de Banksy podría estar completando las hojas de manera metafórica para encerrar un mensaje ecologista.
Mientras la aparición de sus obras de arte en ciertas áreas a veces puede generar controversia y preocupaciones por posibles aumentos de alquileres y el costo de mantenimiento, la comunidad en general recibió de manera positiva esta última intervención.
Recordemos que el año pasado había presentado una nueva obra de arte contra la guerra en el sur de Londres, sobre una señal de tráfico que decía "STOP" adornada con aviones de guerra, lo que más tarde resultó en el arresto de dos hombres por el aparente robo de la pieza.